Camina, habla, aprende, estudia, mejora… todo órdenes, órdenes
que debes cumplir, porque es lo que todo el mundo espera que hagas; es lo que
debes hacer.
¿Y si no es lo que yo quiero? ¿Si lo que quiero no es hacer
lo mismo que los demás? Ser diferente, actuar de forma única, aunque mal vista.
Estudia, mejora, destaca, sé la mejor… ¿Y si no quiero
serlo? ¿Si solo quiero ser una persona del montón que actúe de forma diferente?
Como mi pecho lo decida, como me salga del alma, sin preocuparme del qué dirán.
Salta, grita, corre, sueña… ¡SÉ LIBRE! Que no te preocupen los demás, ellos no son importantes,
aquí la importante, eres tú y nadie más que tú.
Quédate mirando al cielo, sin pensar en nada, sintiendo el
aire en tu cara, tu pelo moviéndose… ahora cierra los ojos y deja volar tu
imaginación… eso en lo que estés pensando es lo que debe preocuparte, lo que de
verdad te hace feliz, lo que quieres convertir en tu nueva orden, un nuevo camino
que seguir.